I N S T I T U T O O S C A R M A S O T T A 2
D e l e g a c i ó n R í o G a l l e g o s
LA ANGUSTIA EN LA URGENCIA SUBJETIVA
(Texto
publicado en el diario La Opinión Austral, el día 05 de Agosto de 2015)
Autor: Lic. Ariel San Román
(Responsable Local de la Delegación Río Gallegos del I.O.M.2)
Cuando
hablamos de “urgencia subjetiva”, la angustia es uno de los
afectos principales sobre el que giran las diversas presentaciones
clínicas que pueden aparecer. Su manifestación, como lo indican
Guillermo Belaga e Inés Sotelo (“Trauma,
ansiedad y síntoma: lecturas y respuestas clínicas”,
en “Persepectivas
de la clínica de la urgencia”,
Ed. Grama, Bs. As., 2009), puede contatarse en la variedad de
elemento somáticos -síntomas respiratorios, cardiovasculares,
digestivos, neuromusculares- y psíquicos -inquietud, perplejidad,
desaliento, terror, duda.
Cuando
se emerge la angustia, podemos en un sujeto avasallado por la
irrupción abrupta de una contingencia que conmueve su existencia.
Hay que tener en cuenta que al hablar de contingencia, ésta puede ir
desde un hecho catastrófico hasta un incidente menor. Lo relevante
es que ese hecho contingente para ese sujeto en particular es
sorpresivo, un excedente, no calculado, disruptivo. Con la
consecuencia de arrancar al sujeto de todas las referencias que lo
sostenían.
Como
ejemplo, se puede citar la “famosa” depresión post-parto, que
masifica bajo un mismo rótulo manifestaciones de diversa índole.
Cuando se indaga sobre las coordenadas que hacen a la emergencia de
la angustia en esas situaciones, puede llegar a encontrarse algun
determinante en su experiencia vital que hace signo, rasgo en cada
una de las mujeres que se ven afectadas: un hijo que viene a suplir a
un embarazo fallido o un hermano muerto, la aparición de un sexo no
esperado, una separación detenida por dicho embarazo, o una
separación precipitada por el mismo, la proximidad o lejanía de su
partener y/o familia cercana, la muerte de un familiar, un embarazo
no deseado o sumamente deseado (por lo cual termina el estado de
embarazo propiamente dicho), etc.
Entonces,
¿qué se lee en una urgencia?. La urgencia siempre confronta al
sujeto al quiebre del modo de funcionamiento con el que transitaba su
vida, a la ruptura del lazo con los otros, con su trabajo, con su
propio cuerpo, con sus pensamientos, que